Alguien quiere escribir algo. No sé que clase de
novela o relato enfermizo, tal vez, solo un mensaje. No quiere tinta ni un
teclado para garabatear sus caracteres, pide mi sangre para hacerlo.
Esta es la
primera amenaza que recibí, todavía la conservo esperando que alguien me
brinde protección.
"No me gusta Letra digital..." |
"....prefiero la letra con sangre" |
Estoy realmente asustado. Desde las últimas dos
semanas tengo esta sensación de acoso, que alguien está al acecho y puso su
objetivo en mí.
No soy una figura pública; no soy famoso ni salgo en
tapas de revista, ni me jacto de la riqueza ni de la gloria (que de hecho, no
las poseo).
Solo escribo en un blog, solo eso.
Tal vez, dejé demasiada información en la red; mi
cuenta en Twitter, Facebook, o en mi propio espacio.
Carta completa, el remitente es de España, recibida hace un mes. Fue un jueves. |
Lo cierto, es que conozco a tantas personas. Claro, de
forma virtual. Los veo en sus hogares, con sus familias, en sus entornos. Al
igual que ellos, yo también expongo fotos de entre casa, creo que hay hasta
imágenes de mi habitación.
En fin, muchos son conocidos que comparten esta misma
pasión, escribir. Algunos de ellos; se los nombres y sus países de residencia,
y de otros conozco sus penas, sin charlar directamente o haber compartido de
cerca su dolor. Es que dejamos entre líneas, configuramos entre relatos y
versos, todas nuestras aflicciones, nuestros miedos, nuestras esperanzas. Es
que leyendo, también podemos conocer, aún más, a los que no están en persona.
Me preguntó, por qué justo a mí. Qué le hice para que
quiera matarme (porque así de explícito ha sido su declaración). Supongo que es
un hombre, pero no lo sé.
Aquellos que siguen este blog, habrán visto dos
peculiares entradas. Mi primera reacción, además del desconcierto, fue un enojo
brutal. No era un comentario anónimo, era una entrada completamente redactada,
como si fuera yo mismo su autor.
Me supongo que soy vulnerable para cualquier cerebro
iluminado en informática y mis pobres barreras han sido franqueables para
producir semejante intromisión. Por cierto, les dejo los enlaces de estas dos
entradas que comenté. Yo no las escribí, tal vez mi otro yo, de seguro estoy
volviéndome loco.
Jueves 20: primera entrada misteriosa. Hacer click para visualizar.
Jueves 18: segunda entrada misteriosa. Hacer click para visualizar.
Jueves 18: segunda entrada misteriosa. Hacer click para visualizar.
Escribí, acaso, algo que lo identificó de tal forma
que, sin quererlo, lo ridiculicé o dejé expuesto un dolor tan inconmensurable
que se reavivó en él o ella. Y asumí, sin intención, como un nuevo culpable para
mi acosador.
Su insistencia es tenaz y sus golpes verdaderas
dosificaciones que enervan y alteran mis nervios.
Quizás esté a kilómetros de distancia, quizás a la
vuelta de la esquina. Su proximidad la siento, porque me ha dado prueba de
esto.
La policía de mi país no es muy útil para mi
situación. Desestiman el peligro, porque no hay pruebas suficientes que exista
una posible materialización del ataque contra mi persona. Mis pruebas no los convence,
ni para iniciar una investigación (ya no su protección solicito). Me explicaron
que esos mensajes no sirven, es un hackeo a una cuenta personal, pero reviste
de entidad; que debería tomarlo como una broma de mal gusto. Igual, me
recomendaron, cambiar contraseñas y códigos, en espacial de tarjetas de
créditos y cuentas bancarias. Irrisorio, porque no poseo cuenta bancaria y el
saldo de mi crédito, al atacante le serviría como máximo para comprarse una remera
nueva, pero no más.
El siguiente video, es una prueba de que mi “Fan” (con
mucha ironía y sarcasmo lo escribo) está muy cerca. Lamentablemente, hoy el
oficial al que me remití la vez anterior, no se encontraba. Así que, me
enviaron de vuelta. Un par de copamientos por la zona afectó la sensibilidad de
los funcionarios, despachándome sin brindarme la posibilidad de exponer la
comprobación de lo que, anteriormente, me exigían
Retomo esta entrada luego de unos días, estoy decidido
a no dejarme quebrar por este angustioso trance.
Esta última parte es casi a tiempo real (o tal vez no, exactamente): ¡Acabo de derramar el café sobre mi maldito teclado! Mis nervios están al límite. Haré lo siguiente; iré a comprar cigarrillos (dejé el tabaco hace dos meses pero realmente lo necesito ahora) y luego limpiaré este enchastre.
**
Ahora, estoy más tranquilo, es casi medianoche y debo
confesarles que tuve una tarde infernal.
Releyendo mis últimos apuntes, luego de la
interrupción por el accidente sobre el teclado. AL volver del mercado, fui a buscar algo
para secar lo que mi paciencia alterada provocó. Cuando me dirijo a la cocina,
me llamó la atención la cámara de fotos digital sobre la mesa del comedor.
El lugar, donde se hallaba, no correspondía (creo) donde la coloqué en su último
uso. La peor parte es que estaba encendida.
Mis manos temblorosas apenas pudieron reproducir la
grabación recientemente registrada:
Obviamente, me dirigí con la cámara a la seccional,
nuevamente. Ahora me toman en serio.
Solo espero que cese la tortura que este hijo de puta me viene
atormentando, tendré compañía policial durante unos días. Me aseguran que todo se irá disipando y que el atacante
dejará de acosarme.
Hace frío, se siente el viento como golpea las ramas
de los árboles con una leve violencia, que quizás acompañe, más tarde, algo de
lluvia, sino una tormenta.
Pienso, que este sujeto se irá de mi vida. Si está
leyendo esto, espero que entienda que logró su objetivo, estoy completamente
rendido y exhausto de esta compleja realidad en la que me sumergió.
Aviso a mis lectores y colegas, que se cuiden y que
espero que no se transformen en objeto de caza de este ser tan oscuro y
perverso.
Él sigue allí leyéndonos.
Me pregunto dónde se habrá metido el guardia, que hace
dos horas salió a inspeccionar los alrededores y todavía no ha retornado…
El año pasado el terror fue sobrenatural, este año el miedo lo provee algo más terrenal.
Los invito a recordar el Relato 2.0 del Halloblogween anterior:
El año pasado el terror fue sobrenatural, este año el miedo lo provee algo más terrenal.
Los invito a recordar el Relato 2.0 del Halloblogween anterior:
3 comentarios :
Jo!! Me has asustado de verdad!, eso no se hace...menos mal que se acaba esto de halloween porque yo ya no participo más, me da miedo ese que nos lee y nos persigue...ah! he oído un ruido raro en la puerta...NO!!!!
Vaya Luis, que situación. Tener un "fan" que te persigue de esa manera tan misteriosa crea mucha intranquilidad.
Tantos datos que vamos dejando por la red consigue que historias como esta se hagan realidad, cada vez con más frecuencia.
Octubre se acaba con sus historias de terror.
Gracias Luis y un abrazo (si sobrevives al acosador/a)
Gracias a todos por dejar comentarios durante todo el especial y por las colaboraciones que hicieron este Octubre tan terrorífico!
El año pasado embrujé mi casita. Este año me inventé un acosador. El próximo siguiendo este estilo, ya tengo pensado que voy a inventar, jeje
Así que los espero en el próximo especial.
33 entradas conforman Halloween en LDU, espero que recorran el blog y dejen comentarios. Ha sido muy entretenido.
Todavía falta mi participación en Halloblogween, termianar la reseña del Cine-biblio-club y la despedida. Todo esto mañana!
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